Un asesor de pregrado en la Universidad
Nacional Abierta debe cumplir ciertos roles no solo académicos, sino también
motivacionales.
Nuestra labor se ve enmarcada en los
orígenes de la UNA, en donde se plasma que la función de la institución es generar
una forma de enseñanza diferente a las aplicadas en las instituciones de
educación superior tradicionales en Venezuela.
La EaD en la UNA posee características
diferenciadoras a la educación presencial, ya que su principal medio para la
transmisión de los conocimientos es el material impreso. Recordemos que en la
educación tradicional el profesor y los estudiantes están físicamente presentes
en un mismo espacio-tiempo (durante las clases), en cambio, en la Educación a
Distancia en la UNA la función del profesor en la transmisión del conocimiento
se ve sustituido por el material instruccional, quedando la función del
profesor transformada en la de asesor académico.
Para comprender mejor la función que
desempeñamos como Asesores Académicos en la UNA, debemos comprender mejor el
perfil de nuestros estudiantes y su proceso de aprendizaje.
Los estudiantes de la UNA poseen
características diferenciadoras, generalmente son personas adultas, con
responsabilidades familiares, laborales y sociales; las cuales exigen su
atención y dedicación. Más también son adultos que comprenden la importancia de
adquirir conocimientos y validaciones académicas que le permitan mejorar su
entorno.
Basado en el hecho de que son personas
capaces de asumir responsabilidades y tomar decisiones con mayor madurez
emocional, la forma en que se lleva a cabo el proceso de enseñanza-aprendizaje en
la UNA es diferente a la de Instituciones Universitarias tradicionales. En
estas últimas el modelo predominante es el pedagógico, mientras que en la
educación a distancia en la UNA predomina el modelo andragógico.
El modelo andragógico, que no es más que
la enseñanza-aprendizaje del hombre adulto, ayuda a que el individuo aprenda a
aprender, estimula la capacidad de cuestionar y analizar lo
aprendido para resolver las contradicciones y ambigüedades del pensamiento.
En la UNA este proceso comienza con el
curso Introductorio, en el cual se les otorga a los estudiantes las
herramientas básicas para su tránsito por la universidad, permitiéndole al
estudiante experimentar por primera vez la EaD. También es un proceso de
adaptación que ayuda a que la transición al método de EaD sea más amigable
inculcando, reforzando e incentivando la autogestión del conocimiento
(autocontrol de su propio aprendizaje).
Otro punto a considerar es la parte
motivacional de nuestros estudiantes, recordemos que ellos reciben estímulos de
su entorno laboral, familiar, social; los cuales llamaremos externos y los que
reciben de parte de los asesores académicos los llamaremos internos.
Citando la opinión de
la Profesora Araminda Turrent R. de la Universidad La Salle México en cuanto a
la función del asesor académico:
“Este acompañamiento conlleva estar al
alcance, en el momento requerido y sobre todo tener la actitud amable y
abierta, ya que el estudiante a distancia a pesar de ser adulto en la mayoría
de los casos requiere de un apoyo muy especial, que lo motive a continuar, que
le dé seguridad y le permita crecer en sus actividades y en las posibilidades
de ampliar y actualizar sus conocimientos.”
Al ingresar en la UNA como estudiante, nos
vemos en la necesidad de “aprender a aprender”, es común recibir apoyo del
entorno familiar y social para la consecución y logro de nuestros objetivos académicos,
mas el ámbito laboral frecuentemente suele ser fuente de obstáculos. ya que las empresas puede negar o
dificultar con burocracia los permisos para la presentación de pruebas,
asesorías, pasantías, entre otros; lo cual es una situación común para muchos
de nuestros estudiantes.
Esta situación es motivo suficiente para generar
deserción en los estudios, aún más si el estudiante es el principal responsable
económico de una familia. Muchos se preguntarán ¿Qué estimulo puede marcar la
diferencia entre desertar o continuar en la UNA?
La respuesta no es simple, si se toma la
experiencia como estudiante UNA y ahora en el cumpliendo de nuestro papel de
asesor académico los estímulos motivadores recibidos por nuestros estudiantes
de nuestra parte pueden ayudar considerablemente a disminuir la deserción.
El apoyo, motivación, orientación son contribuyentes
poderosos para subir el autoestima del estudiante ayudándole a asumir de manera
consiente el valor que tiene su deseo de superación académica y accediendo a
través de la asesoría a la vivencialidad profesional acumulada por los
asesores, los cuales al ofrecerla, les puede permitir contar con herramientas
que le permitan hacer frente y superar los obstáculos.
Como asesor en el Centro Local
Metropolitano, asumimos la responsabilidad personal y profesional de contribuir
a la disminución de la deserción de nuestros estudiantes, así como contribuir a
facilitar su paso por nuestra casa de estudios.
Aún cuando es cierto que nuestro ingreso
en la Institución se realiza a través de mecanismos formales con el fin de
cumplir con la tarea de transmitir conocimiento de la carrera de Contaduría y
también fungir como nivel corrector de las asignaturas bajo nuestro cargo, es
vital para nuestro desempeño como asesor el orientar y motivar a los
estudiantes no solo con los contenidos académicos, sino el cómo poder
desarrollar su propia autogestión en cuanto a su proceso de aprendizaje, optimizando
el uso de los materiales que se le facilitan y conocer a la Institución. La
siguiente lamina muestra las funciones ejercidas por el asesor académico en la
UNA:
Lámina 1: Elaboración propia
Otro punto a resaltar es la existencia de
una baja identificación Estudiante-Institución, como si cada ente fuese
independiente del otro o cuya relación fuese de obligación (el estudiante está
obligado a cumplir con las evaluaciones para obtener un título y la institución
está obligada por la Ley a evaluarlos para otorgárselos).
Es importante que la UNA comience en todos
sus niveles Jerárquicos a desarrollar una cultura al estudiante UNA, así como
una imagen Institucional con más presencia en la mente en la sociedad
venezolana.
La UNA es la única Universidad con
presencia a Nivel Nacional. También ofrece excelentes programas de extensión
universitaria de un nivel académico de calidad, capaz de rivalizar con las
ofertas de prestigiosas instituciones de nuestro país, y aún así, son muchos
los estudiantes que lo ignoran. Esto sin contar que la mayoría de nuestros
estudiantes potenciales ni siquiera conocen la existencia de la UNA.
Es por esto que el asesor UNA debe asumir
aptitudes y actitudes que le permitan una mayor empatía con los estudiantes, ofreciendo
cordialidad, respeto, atención a sus necesidades en la comprensión de los
contenidos, vías de comunicación alternas, entre otras; como una forma de
mejorar su interacción con la Institución y de facilitar sus actividades
académicas.
Otro aspecto relevante es la relación que
debe existir entre los especialistas de contenido, evaluadores y asesores. Actualmente
dicha interacción se encuentra muy limitada, perdiéndose oportunidades de retroalimentación
y fijación de lineamientos vitales en el proceso de la EaD. Se hace prioritario
una política de intercambio de conocimientos y parámetros que contribuyan a
alimentar el proceso y las tareas de todos los roles de la UNA.
A nivel personal considero que la labor
como Asesor Académico en el Centro Local Metropolitano es motivo de orgullo,
además de ser una oportunidad valiosa para el enriquecimiento personal y
profesional que se recibe día con día. Además, a nivel profesional (como asesor
independiente para empresas en los rubros contables, administrativos y
publicitarios) facilita la comprensión de los empleados que desempeñan
determinadas tareas y permite contar con basamentos para insistir a las
empresas que comprendan la importancia del mejoramiento académico de su
personal.
Ya que el capital humano debe ser
cultivado por las organizaciones como un activo prioritario e indispensable,
aún más bajo las circunstancias económicas y necesidades de adaptación casi
diarias requeridas por el entorno económico.
RECOMENDACIONES
- Creación de
mecanismos de intercambio de experiencias y resultados entre Asesor
Académico, De Contenido y de Evaluación.
- Desarrollar procedimientos
que contribuyan a generar una Cultura Organizacional orientada al
estudiante.
- Generar
actividades que ayuden a masificar el conocimiento de la oferta académica
de la UNA a la comunidad estudiantil y a la sociedad. Proactivo
- Mejorar los
procesos de impresión de los materiales instruccionales, como una manera
de contribuir al proceso de enseñanza-aprendizaje de nuestros estudiantes.
- El área de
operaciones debe desarrollar una planificación de mejoras físicas al
Centro Local Metropolitano con el fin de que el personal pueda contar con
las herramientas e infraestructura necesarias para el cumplimiento de sus
actividades.
CONCLUSIONES
La
UNA posee una estructura académica-operativa diferente a la de otras
Universidades, por ende en el cumplimiento de nuestros roles debemos aprovechar
la interacción con nuestros estudiantes y la información-vivencias de nuestros
compañeros con el fin de convertirnos en multiplicadores de la información
generada en el circuito:
ESTUDIANTES – CENTRO LOCALES – NIVEL CENTRAL
En
el circuito los Centros Locales representan a los orientadores y asesores
académicos, mientras que Nivel Central a los Evaluadores, Especialistas de
Contenido y Diseñador de Instrucción. Deben existir canales de comunicación
cruzados que contribuyan a la retroalimentación.
Es
importante tomar medidas que contribuyan a dar a conocer a la Universidad la
sociedad y a nuestros estudiantes potenciales, esto permitirá a la UNA poder
mejorar su proyección en el tiempo y espacio.